Dos títulos más y un tercero al caer

El que pasó, fue un fin de semana de festejos en el Fútbol Macabeo: por un lado, los Veteranos Juniors se coronaron dándole al club por primera vez el título en esta categoría; mientras que en Inferiores, la Quinta FACCMA salió campeona de la Copa de Oro de su categoría, logrando así el bicampeonato. Además, la Sexta FACCMA quedó a un paso de su tercer título del año, mientras que los más grandes tuvieron resultados variados. 

Noviembre va llegando a su fin, y lo mismo sucede con los torneos que afrontan las distintas categorías del Fútbol Macabeo. Como es costumbre, la mayoría de los equipos se encuentran peleando por el título. El primer logro del semestre fue el de la Séptima FACCMA (Cat 2001), que la semana pasada consiguió el campeonato tras empatar con Hebraica. El último fin de semana, otras dos categorías se dieron el gusto de dar una vuelta con la camiseta de Macabi puesta. El primero, que fue el sábado, tuvo un gustito especial: por primera vez en la historia, Macabi salió campeón en la categoría de Veteranos Juniors, tras un gran campeonato, en el que ganaron siete, empataron tres y perdieron sólo uno, los más jóvenes de los veteranos se alzaron con el título y festejaron antes, durante y después de la victoria sobre Britajim, con mucho color y mucho ruido, acompañados de todas sus familias. 

Por otro lado, el fin de semana también debía definirse el campeonato de la Quinta FACCMA, donde Macabi y Hacoaj llegaban con los mismos puntos en la recta final. Los dirigidos por Toro Faiman, que el domingo pasado no tuvieron partido, tuvieron que jugar sábado y domingo. En primera instancia, la
Categoría 1997 tuvo que visitar al duro Macabi La Plata, equipo que cuando visitó San Miguel logró llevarse un punto, tras el empate en 0. Esta vez, las cosas fueron diferentes: gracias al gol de Ivan Urbaj, Macabi se trajo los tres puntos y la seguridad de que para terminar en la primera posición no se dependía de nadie. El domingo había que ganar frente a Kadima/Barkojba y esperar que Cissab le sacara, al menos, un punto a los de Tigre. Macabi cumplió con su parte, y con goles de Eze Teper, Mati Slavsky y uno en contra, ganó 3-0. Desde Tristán Suarez no llegaron buenas noticias: Hacoaj había conseguido el mismo resultado. De esta manera, y por disposición de FACCMA, ambos equipos son campeones. Fantástico año de la Quinta, que ganó los dos torneos que jugó y ambos de manera invicta.

El otro equipo que se encamina al bicampeonato en FACCMA es la Sexta (Cat 1999), que ganó los puntos frente a Britajim, que no se presentó, y de está manera quedó muy cerca de dar la tercera vuelta en el año, contando el título del Mundialito. Los dirigidos por Fabio Liebman recibirán a Sosiego el domingo y les basta con un empate para consagrarse otra vez.

A los que el fin de año no le da muchas posibilidades de festejar es a los planteles superiores del club. Por un lado, la Primera FACCMA y la Reserva tuvieron fecha libre el domingo que pasó, día en que se consagraron campeones Barkojba, en Primera, y Hacoaj, en Reserva. Por otra parte,  La Primera AIFA debía enfrentarse a Sitas, equipo líder del torneo, con la esperanza de obtener tres puntos y
esperar una caída de Nueva Unión que le diera chances de pelear el torneo hasta la última fecha. El equipo dirigido por Lule no pudo aprovechar la victoria de UBA frente al último campeón de AIFA, y fue superado por Sitas, que ganó 3-1 y se consagró campeón. Por último,la Primera C, tras el ascenso consumado y la eliminación de la Copa Sindelar, se encuentra disputando los últimos partidos del año. El domingo empató 1-1 con Gurei Tzion.

La última ilusión que queda es la Copa Sindelar, para la cual el Tano Orsini cuenta con los jugadores de las Primeras de AIFA y FACCMA, y los de Reserva. La idea es jugar la semifinal con Cissab el martes que viene, pero todavía tiene que responder CISSAB y dar el visto bueno. Por lo pronto, este domingo será la última fecha del Clausura, donde Macabi visitará a Bami con el único objetivo de terminar el torneo con una victoria.

Por Juli Micheles