jueves, 20 de septiembre de 2012

Suspensión insólita

La Reserva vencía 3-2 a Las Brisas y se encaminaba a liquidar el encuentro a falta de diez minutos, pero el juez se encaprichó y suspendió el partido. Este mismo árbitro ya tenía un antecedente con este equipo de Macabi: en el Apertura había amagado con suspender  por un ridículo motivo el encuentro que la Reserva le terminó ganando a Sosiego por 4-3. Esta vez no tuvo vergüenza y, a pocos minutos del final del partido, se fue al vestuario junto con los dos jueces de línea. Ahora todo depende de FACCMA, que mediante su tribunal de disciplina decidirá cómo resolver la situación.

La mañana no había empezado bien: el partido arrancó 45 minutos más tarde porque, supuestamente, los jueces estaban esperando a que les den una llave del vestuario para guardar sus cosas. La misma terna, había amenazado al equipo de Fede Andrade en el Apertura, diciéndole que si no dejaban la entrada en calor y se iban a la cancha, perderían los puntos por no cumplir con el horario. Eso no fue lo peor de aquella tarde en Sosiego: el juez expulsó al técnico de la Reserva (por una tontería) y lo quiso mandar al vestuario (ubicado bastante lejos de la cancha), algo totalmente ilógico. Ante la negativa del entrenador a irse al vestuario, el árbitro quiso suspender el partido, algo que finalmente no sucedió.

Este flashback sirve para contextualizar lo que pasó el domingo en Las Brisas: el juez no tuvo una buena actuación, pero los jugadores de Macabi no discutieron nada -ni siquiera cuando obligó a Fede Gabay a salir de la cancha luego de un foul, sin que haya entrado el médico o el entrenador, amenazándolo con amonestarlo si no salía- porque sabían que ante cualquier situación, el árbitro sacaría tarjeta amarilla. Las Brisas, en cambio, si le protestó bastante, y por eso a los 30 minutos del segundo tiempo ya estaba con nueve jugadores. Faltando poco para que termine el partido, Gasti Himelfarb fue derribado adentro del área, pero el juez omitió el foul. Los padres macabeos, que se encontraban en las gradas mirando el partido, le reclamaron el penal al árbitro. El réferi paró el partido y quiso echar de la cancha a los padres, que obviamente no quisieron irse. Ante esta respuesta, el juez amagó a suspender el partido: con esta amenaza los padres accedieron a retirarse. Cuando los de Macabi se estaban yendo, un padre de Las Brisas le dijo al árbitro que no estaba pasando nada con los que estaban afuera, a lo que el juez respondió diciéndole a él también que se vaya, según dijo el padre, afuera del country. El hombre de Las Brisas se negó, lógicamente, explicándole que ahí era su casa, que no se iba a ir. En ese momento el juez llamó a los líneas, y suspendió el partido "porque no estaban dadas las garantías". Pese a que todos los padres se estaban retirando y al pedido de jugadores y técnicos de ambos equipos, no revirtió la decisión y se fue al vestuario.

Todos los presentes se sorprendieron sin saber qué hacer: a falta de diez minutos el partido quedaba suspendido sin que haya habido violencia física o verbal o inconvenientes entre los jugadores, entrenadores o lo que sea; simplemente un árbitro que quiso ser protagonista y lo terminó siendo. Ahora todo quedó en manos del tribunal de disciplina de FACCMA, a quien Macabi ya le escribió un descargo de la situación. Ojalá quienes tomen la decisión estén a la altura de las circunstancias y le hagan caso tanto a lo que Macabi como Las Brisas tienen para decir, y este juez no dirija más en el fútbol de la comunidad.

Por Juli Micheles

1 comentario: